Insectero
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Carl Tetrabrik vagaba por el mundo en busca de insectos. No le gustaban los insectos, incluso los odiaba, pero vagaba en busca de ellos.
Siempre trataba de evitarlos saliendo a pantanos dentro del bosque cuando hacía calor. Metía la mano en hormigueros para tratar de evitar a los malditos insectos. Incluso conducía cientos de kilómetros para patear colmenas y así poder evitar más aún a los insectos. A veces, para ahuyentarlos, esparcía la basura por toda la casa y la dejaba ahí durante meses. Sí, para evitar insectos.
En cierta ocasión charló con un ciempiés sobre los insectos, sin percatarse de que un ciempiés es un insecto. Entonces, vueltas que da la vida, se puso a comer mayonesa con pan, cosa que hacía con una frecuencia despampanante. Así era Carl, para lo bueno y para lo malo. Un tipo indescifrable, aunque seguramente porque el mando de su cerebro se había perdido en algún hueco del sofá.
Foto de un ciempiés paseando por el bosque, aunque no es el que habló con Carl, by Emil Dupentis
