El ratoncito Pérez
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El animal con más dientes, el Ratoncito Pérez, se vio apurado por la crisis, así que comenzó a pagar la muela a 20 céntimos y las paletas a 50.
Los niños se indignaron: un bicho que lleva tanto tiempo en el negocio de los dentistas, y a nivel internacional, debería tener millones. Así que le hicieron boicot tirando los dientes a la basura y dejando notas bajo la almohada con frases como «demasiado chorizo para tanta encía». Y Pérez entristeció muchísimo.
En cambio, su mujer,la Ratita Presumida, estaba muy contenta, ya que solo ella sabía que la atracción de su marido por las dentaduras no era por negocio, sino por un síndrome de diógenes mal llevado y consentido.
