Mar. Jul 2nd, 2024

Glüstis Tapang

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Dibujante de medio pelo y excretor de relatos que come trigo en un trigal. 97 kilos de vida dubitativa a la par que ondulante.

Comenzó a dibujar con 4 años y ganó varios concursos de dibujos vagos en Burkina Faso del norte. Desde hace siete años tiene el honor de ser parte agnóstica de la Loboteca, la revista más iconoclasta y genial de la historia.

Entre sus aficiones se encuentran la cocina express, el café y los deportes de equipo, así como mascullar tropelías en algún idioma propio. 

No le gusta el pepino.

Tras permanecer durante 5 años en una cárcel ugandesa por pisar a un transeúnte albino, Tapang decide explorar otros mundos interiores y se refugia en Cambalud para ver como le crecen las uñas a su mascota, el loro Mandulé. 

Tras darse cuenta de que se aburría como una ostra traslúcida y tras lloverle ofertas de trabajo a tiempo parcial, opta por ser chófer en Mudanzas Legionela, labor que compagina con su colaboración en La Loboteca. 

 

 

                 Tapang, conduciendo por la izquierda en un día de trabajo, by Josterflon Mecidonio

 

 

                                                Texto – Glüstis Tapang    Ilustraciones – Glüstis TapangDingo Wollobolf

 

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